OMS sugiere usar impuestos al tabaco y alcohol para salud pública
Noticias de Chihuahua
La Organización Mundial de la Salud (OMS) propuso que los países implementen un aumento del 50% en el precio de productos como el alcohol, los refrescos y el tabaco, a través de impuestos especiales, con el objetivo de reducir su consumo y mejorar la salud pública global. La medida forma parte de su estrategia “3 por 35”, que busca generar un impacto sanitario significativo para el año 2035.
Durante la Conferencia de Naciones Unidas sobre Financiación para el Desarrollo, celebrada en Sevilla, España, Jeremy Farrar, subdirector general de Promoción de la Salud y Prevención y Control de Enfermedades de la OMS, declaró que “los impuestos sanitarios son una de las herramientas más eficaces de que disponemos” y llamó a los gobiernos a actuar con determinación.
Por su parte, Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, destacó que esta es la primera vez que el organismo promueve de forma conjunta el incremento de impuestos para los tres productos: tabaco, bebidas alcohólicas y bebidas azucaradas. Tradicionalmente, la OMS ha promovido políticas fiscales contra el tabaquismo, y más recientemente, contra el consumo de alcohol y refrescos.
El organismo internacional también sugirió que lo recaudado por estos impuestos se destine al fortalecimiento de los sistemas de salud, como parte de un enfoque integral de prevención y financiamiento sanitario.
En el caso de México, ya se cuenta con un impuesto aplicado a estos productos: el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS). Este gravamen tiene como objetivo precisamente desincentivar el consumo de sustancias nocivas.
Actualmente, los cigarrillos en México tienen un IEPS del 160%, lo que rebasa ampliamente el porcentaje sugerido por la OMS. En cambio, para bebidas alcohólicas, la tasa varía entre el 26.5% y el 53%, dependiendo del grado de alcohol, mientras que las bebidas azucaradas se gravan con una cuota de 1.64 pesos por litro.
Aunque México ya aplica este tipo de políticas fiscales, los nuevos lineamientos de la OMS podrían influir en un reajuste que eleve aún más el precio de estos productos, con el argumento de proteger la salud pública y reducir los costos asociados a enfermedades crónicas no transmisibles.